¿Has sentido tanto miedo que creías que no iba a salir la voz o te ibas a quedar en blanco? ¿Has salido corriendo?

Aquí te dejo algunos tips para que puedas manejarlo:

  • Respira despacio. Toma aire en 5 tiempos y expulsa en 7. Repite esto varias veces hasta que sientas que tu ritmo cardiaco vuelve a la normalidad. Al expulsar el aire más despacio reduces el CO2 en sangre más rápido y rebajas en nivel de cortisol.
  • Siguiente paso: sintetiza en tu cabeza, como si fuera el título de una película, el mensaje que quieres dar, con qué idea quieres que se vayan aquellos que te escuchan. Al concretar toda tu energía se focalizará en transmitir esa idea y te servirá para aumentar la concentración.
  • Después lleva tu atención, que no tu mirada, a tus pies. Siente como se apoyan en el suelo, imagina que son raíces que crecen y te dan seguridad y base a medida que vas hablando.
  • Y por el último, el más importante: GOZÁTELO. Aunque te parezca imposible, con práctica lo conseguirás. Comunicarnos es una suerte, tener algo que decir, alguien que te escuche es una de las grandes conquistas del ser humano. Así que disfrútate, y si algo sale mal, ríete porque no pasa nada, no estás operando a corazón abierto.

Si quieres más consejos o practicar te esperamos en Teatro para la vida