Los actores y las actrices profesionales somos como músicos o deportistas de alto rendimiento, solo que, en vez tener un instrumento o un objetivo tangible como ser el más rápido o el que salta más alto, tenemos nuestras emociones y nuestra capacidad para comunicarlas, por eso es muy importante conocernos en profundidad.

A veces nos enfrentamos a personajes que están muy alejados de nosotros y nosotras, o queremos arriesgar y proponer un punto de vista diferente o simplemente nos bloqueamos por querer impresionar o hacerlo lo mejor posible. Y nos convertimos en nuestro peor enemigo.

Contar con nuevas herramientas con las que abordar las dificultades y fortalecer nuestros recursos para poder comprometernos más en profundidad con el trabajo, son pasos fundamentales para ponernos en juego durante la creación desde un lugar sano y enriquecedor.

Desde Teatro para la vida os ofrecemos un espacio de cuidado y desarrollo donde entrenar y abriros a nuevas formas de interpretar y ampliar vuestra técnica.

Os esperamos.